El miércoles pasado  salí de Rovaniemi hacia Saariselkä, a unos 250 km al norte, en el corazón de Laponia.Fui con dos compañeros de trabajo, Miku y Leena, y allí nos encontramos con Taimi y Tuomo. Los objetivos de este viaje de 24h han sido varios:  Por un lado Miku, responsable de operaciones de Eräsetti Wild North en Rovaniemi, quería conocer en profundidad la zona de Saariselkä, donde trabajamos habitualmente; Por otro lado, queríamos saludar a nuestros proveedores, algunos amigos después de tantos años, y disfrutar junto a ellos de una charla y un buen café de puchero sin la presión de tener ningún turista detrás o algún cliente de prospección. Una charla distendida de amigos, sin más; Por último queríamos escuchar las noticias que algunos tenían preparadas.
Dormimos en una cabaña tradicional, roja con las esquinas y los bordes de las ventanas en blanco, a la orilla de un pequeño lago. Al despertar, fuimos a tomar con Timo el primero de los muchos cafés que tomaríamos ese día. Timo es un sami dueño de Joiku, una de las granjas de renos con las que trabajamos.
Kota de Joiku en Saariselkä
EnKakslauttanen, Jussi Eiramo nos esperaba con artillería pesada en forma de nuevos proyectos. Tanta cosa buena se merece una entrada aparte en este blog.
Y buenas noticias también las que nos ha dado Virpi Hietanen sobre la renovación del restaurante Petronella. Y no es que hiciera falta, pero después de 20 años manteniendo un estilo clásico, han decidido tirarlo por dentro para reconstruirlo con materiales de la zona: piedra y madera, dándole un toque más natural. En la cocina, considerada una de las mejores de Finlandia por el diario finés Kauppalehti, no habrá cambios. En Petronella no deberíais perderos la crema de los tres cangrejos: langosta, cangrejo real del ártico y cangrejo de río.
Saariselkä está tranquilo estos meses. El número de turistas es anecdótico durante el verano en comparación con el invierno, a pesar de la oferta de actividades de las que hablaremos en algún momento. Pero aunque esté tranquilo, nunca duerme. Cada verano que lo visito me encuentro con proyectos más o menos grandes cuyo objetivo es mejorar la experiencia de los turistas que se atreven a subir hasta estas latitudes.
Suerte a todos con sus proyectos!