Mucha gente opina que Helsinki puede llegar a parecer una ciudad demasiado gris pero seguramente los que lo opinan no han conocido algunos de los parques que le dan un aspecto mucho más verde y natural, en contraste con sus edificios y la estructura cuadriculada de la ciudad. Para todos ellos, además, hoy aprovechamos para destacar uno de estos parques que se nos antoja especialmente original.

Se trata del denominado como Parque Sibelius que, como más de uno habrá podido adivinar, toma su nombre ni más ni menos que de Jean Sibelius, el reconocido compositor de música sinfónica que destacó con sus creaciones durante el pasado siglo.

Y es que precisamente el Parque Sibelius tiene mucho de parque, como su propio nombre indica, pero también mucho aire musical. Porque, para todo aquel que no lo sepa, el mayor encanto que podemos llegar a encontrarnos en el Parque Sibelius no es otro que un gran y creativo monumento que está formado por, nada más y nada menos, que un total de quinientos ochenta tubos de acero que, cuando sopla el viento, realizan un musical sonido que no dejará a nadie indiferente.

Otro de los mayores encantos de este parque, al que podrás acceder desde las calles Merikannontie y Mechelininkatu, es su especial ubicación, ya que se encuentra situado al borde del mar.